Consejos para el cuidado de tu traje de neopreno
El neopreno es una de las prendas que hay que cuidar con mucho cariño si queremos que nos dure.
Una vez hemos elegido qué neopreno se adapta mejor al uso que le vamos a dar y a nuestro bolsillo, lo mejor es seguir unos pequeños consejos prácticos para alargar su vida útil.
Así que ¿Quieres que tu traje de neopreno te dure más tiempo?
Lee este artículo en el que te damos unos pequeños consejos para no dañar tu traje de neopreno con malas acciones que todos alguna vez cometemos.
Pensamos equivocadamente que al tener un traje de neopreno de gama alta este nos durará más tiempo que si hubiésemos comprado uno de gama inferior.
Pues no es así, los trajes de gama alta poseen una mayor elasticidad que los de una gama inferior, para que nos sea más cómodo el ponerlo, quitarlo y para nuestros movimientos en el agua, como remar y movernos en la tabla.
Pues bien, son más buenos en este sentido, pero al poseer un neopreno con mayor elasticidad, este es aún más sensible que los trajes de gamas inferiores, y es muy importante cuidarlos bien.
Si sigues estos consejos que te explicamos a continuación no tendrás problema en conservar durante más tiempo tu traje de neopreno:
1.- Nunca dejes sacar tu traje de neopreno al sol.
Este es el consejo más importante a seguir.
La exposición al sol del traje de neopreno hace que este se reseque y pierda su elasticidad.
Normalmente, cuando lo utilizamos en la playa, lo ponemos a secar al sol. Esto es un gran error.
Si estas en la playa, ponlo a la sombra o debajo de tu funda.
El sol es uno de los peores aliados de tu traje de neopreno. Cristaliza el salitre que está en las costuras y las deteriora.
La exposición prolongada al sol, hace que tu neopreno se decolore y se vuelva mucho más rígido
Ponlo a secar a la sombra, del revés y colgado en una percha por la cintura.
Es preferible que dejes tu traje mojado en el interior de tu coche a que lo expongas al sol.
Lo más aconsejable es que lo tiendas en el interior de tu casa, por ejemplo en el baño, sin ninguna exposición al sol una vez enjuagado.
2.- Aclara el traje de neopreno con agua dulce.
Sí, reconozco que es un verdadero aburrimiento, pero la sesión de todo surfero no termina hasta que no tiene su neopreno listo y revisado para su próxima sesión.
Si la pereza te puede, piensa en los 200-500 euros que te has dejado en él y que por no lavarlo, lo vas a destrozar.
Un consejo: no se te ocurra meterlo en la lavadora, ¡¡por favor!!
Entre otros fabricantes, Rip Curl desaconseja utilizarla porque hace que el traje de neopreno pierda cualidades.
Una vez concluida la competición o el entrenamiento, agua dulce para limpiarlo bien.
Evitar siempre la sal y el cloro, porque acabarán dañándolo.
El agua salada puede causar que el traje de neopreno pierda flexibilidad, además de que un traje no enjuagado acabará oliendo mal.
Aquí ya cada uno tendrá que adaptarse a sus posibilidades: si tienes manguera en tu casa, bastará con darle un buen manguerazo con agua fría; otra opción es meterlo en la ducha o en la bañera y enjuagarlo bien.
Comprueba que la cremallera está bien limpia. Es importante evitar que quede salitre en el neopreno o en las cremalleras y costuras.
O si no para endulzarlo, sumérgelo en un cubo con agua natural y luego lavarlo por el interior y el exterior.
Evita también el agua caliente, aunque sea en invierno y tengas frío, ya que deteriora el neopreno haciendo que se estire demasiado.
3.- No dejes secar tu traje de neopreno sobre una percha.
Cuando tu traje de neopreno está mojado, pesa 2 a 3 veces más que su peso original.
Si dejas secar el traje de neopreno sobre una percha, vas a deformar la zona de los hombros, a la vez que el traje de neopreno se pondrá cada vez más fino.
Cuélgalo siempre del revés y si lo haces en una percha, que sea por la mitad. Tampoco es mala idea colgarlo en cualquier barra horizontal, en la mampara de la ducha, o si tienes una superficie horizontal, puedes extenderlo y darle vuelta y vuelta, como si de una barbacoa se tratase.
Eso sí, por favor, evita que se churrusque como la panceta. Como ya hemos dicho, el sol es el mayor enemigo de tu neopreno.
4.- Vigila cómo y dónde ponerte el traje.
Presta atención a cómo te pones o quitas el traje de neopreno, ya que muchas veces tenemos las uñas largas y al colocarnos el traje clavamos nuestros dedos en él para tirar con fuerza. Eso hace que si tenemos las uñas largas lo podamos rasgar sin darnos cuenta.
Con los trajes de neopreno liso (tipo piel de foca) debes tener especial cuidado ya que son aún más sensibles a estos pequeños cortes.
Y al contrario, a la hora de quitarlo es habitual ver a la gente tirar de las mangas o de las piernas estirando las costuras.
Hazlo con calma y despacio.
Evita acumular todo el neopreno en el tobillo para que pueda salir el pie con facilidad.
Debes saber que ninguna marca de neopreno te va a cubrir una garantía si es debido a un corte en tu traje, sea por las uñas o por un quillazo.
No te cambies en un suelo agresivo.
Cuando salimos del agua no prestamos atención donde nos cambiamos el traje, si es en la playa no pasa nada, la arena solo te lo va a ensuciar, pero si te cambias en el parking puedes hacerle mucho daño a tu traje.
Intenta cambiarte en un suelo no agresivo para tu traje, como por ejemplo un césped o en la misma arena de la playa.
Evita los suelos duros como el asfalto, que pueden arañar tu traje de neopreno.
5.- Guárdalo en un lugar fresco y oscuro.
Una vez que está seco por ambos lados, en la misma percha y colgado por la cintura, guárdalo en un lugar fresco y oscuro.
Ya limpio y totalmente seco, hay que guardar el traje de neopreno en el armario. Para tal función elegiremos una percha ancha de plástico o madera para que la zona de los hombros no se deforme (vale una normal con una espumas añadidas, sujetas con un poco de cinta).
Se desaconseja el uso de pinzas porque dejan marcas.
Y para colgarlo es conveniente hacerlo del revés, metiendo los brazos dentro y situando la zona de las piernas sobre la percha.
Y el último detalle, si tenemos previsto dejarlo guardado durante una larga temporada, se centra en echarle polvos talco y cubrirlo con una bolsa, evitando que el aire y la luz incidan de forma directa.
Ya nos gustaría a muchos que nos trataran como a un neopreno, ¿verdad? ;-)