¿QUÉ ES HACER EL PATO?

El pato es una técnica básica que debes aprender para progresar en el surf. 

Esta especialidad es una técnica para montar, cabalgar y superar las olas, muestra clara del surf; es característico del mismo.

Consiste en meterse con la tabla por debajo de la ola o la espuma formada en la misma; el objetivo de esta acción es superarla de forma exitosa, llegando al punto donde la ola rompe, sin ser arrastrado por la misma hacia la orilla.

Esta práctica requiere de una destreza especial, en la que ahora vamos a conocer las etapas en que se divide o que componen la realización de la técnica del Pato, también llamada Cuchara o Duck Dive.

Se trata de una de las maniobras del surf que antes deberíamos aprender a realizar correctamente. 

No se trata por lo tanto de una técnica de puesta en pie sobre la tabla de surf, ni una técnica de remada para conseguir alcanzar la ola, sino de todo lo contrario. Hablamos de un método para alcanzar la zona en la que están rompiendo las olas.

En resumidas cuentas, hacer el pato se basa en bucear por debajo de la ola o espuma con la tabla para evitar la fuerza de la misma.

Cualquier surfista profesional debe dominar (aunque a muchos se nos atraganta), y que debe ser enseñada en cursos de niveles intermedio y avanzado en cualquier escuela de surf.

Es una técnica en el surf de gran dificultad, que, para muchos, entraña tanta dificultad como la realización de maniobras complejas, tales como un floater, un tubo o un re-entry.

Es necesario aprender, entre otras cosas, la manera de realizar los movimientos del cuerpo en el agua, de tal manera que se pueda sumergir profundamente con la tabla todo lo adecuado y no ser arrastrados en el proceso.

FASES DE LA TÉCNICA DEL PATO

Remada de acercamiento

Aproxímate con velocidad: es importante que remes con determinación hacia la ola que viene de frente.

Cuanto más rápido vayas, más fácil penetrarás el agua.

Rema con fuerza, es el consejo que debes tener en cuenta.

Es importante que antes de que nos alcance la ola tengamos una cierta velocidad para poder superarla.

Si la ola nos pilla parados, será imposible realizar la maniobra del pato y nos revolcará. La remada debe ser progresiva, similar al supuesto de que cogiésemos una ola.

Se deben realizar un par de brazadas de gran potencia 2 metros antes de que nos alcance la ola o la espuma de la misma.

Debes tener en cuenta dejar una distancia prudencial con la ola para continuar con la técnica.

Entrada en la ola

Agarra los cantos de la tabla, en la parte superior de la misma, entre la altura del pecho y los hombros, dependiendo de la longitud de tu tabla.

Es importante que agarres con fuerza y que tus brazos estén a la misma altura.

El siguiente paso se realiza estirando los brazos y colocando una rodilla o el pie en la cola o tail de la tabla.

La otra pierna debe dar una patada hacia arriba, para generar un impulso potente hacia abajo.

En ese momento, debes empujar con todo tu cuerpo la punta de la tabla hacia el fondo de la ola.

Si realizas bien la remada del primer paso, la tabla se impulsará a la vez hacia adelante.

Es importante que mantengas los brazos rectos hasta que la tabla está sumergida y continúes ayudándote con la rodilla o el pie.

– Una vez que hayas llegado al punto más profundo y la tabla está en paralelo al fondo, flexiona los brazos y pega el pecho a la tabla. 

Equilibrado

Esta fase consiste en empujar con el pie o la rodilla, utilizando los brazos como ayuda, para lograr bajar lo máximo que sea posible, con el cuerpo pegado por completo a la tabla, teniendo cuidado de esperar unos instantes mientras pasan las turbulencias ocasionadas por la ola.

Asegúrate de que llevas el cuerpo hacia la tabla de surf, no la tabla hacia ti.

Al mismo tiempo, presiona fuerte con la rodilla/pie en la cola para que la tabla salga a la superficie por la punta.

Si has hecho todo correctamente, en este punto la energía de la ola ya debería haberte superado completamente.

Aprovecha la mecánica de la ola

Al crearse una ola, el agua se mueve bajo la superficie con forma circular.

Cuando este movimiento llega a profundidades considerables comienza a levantarse y se crea la ola.

La técnica del pato te coloca a ti y a tu tabla dentro de ese movimiento circular.

Por tanto, una buena cuchara, se mantiene en una curva semicircular de principio a fin.

Si lo haces bien, notarás como la propia ola te lanza a ti y a tu tabla hacia la superficie.

Usa el rebote

Cuando el labio de la ola impacta con el agua, rebota hacia arriba como si de una pelota de tenis se tratara.

Mientras la ola rota avanza, ese rebote va cesando lentamente.

Si consigues reconocer ese rebote, puedes hacer la cuchara en el punto donde el bote va hacia arriba. Algo que te facilitará la tarea.

Eso sí, como el bote te coja bajando, no evitarás ese doble zarandeo tan desagradable.

¿QUÉ PUEDE SALIR MAL EN LA ENTRADA?

-      El cuerpo puede quedar retrasado para cargar sobre la punta de la tabla o los hombros puedan quedar atrás respecto a las manos sobre la tabla.

-      Fallar al no dar la patada en el momento adecuado.

-      Cometer errores al momento de hundir la tabla fallando el ángulo apropiado, lo que hará que la tabla quede muy horizontal o muy vertical y la entrada no será exitosa.

-      No extender suficientemente los brazos para ayudar a sumergir con más facilidad la tabla.

-      No pegar el cuerpo adecuadamente a la tabla para favorecer el hundimiento con suficiente profundidad.

Salida de la ola

Tras unos segundos bajo la ola, cuando notes que ha pasado completamente llega el último paso del pato.

Debemos dar un empujón fuerte a la cola de la tabla de surf, ya sea con la rodilla o con el pie. De este modo conseguiremos girar la posición de la punta y que coja una dirección ascendente.

La salida de la ola será veloz, debido al impulso de las turbulencias internas que se generan bajo el oleaje y a la fuerza ascendente de la tabla y de nuestro cuerpo.

Debemos tener en cuenta una serie de detalles muy importantes a la hora de hacer el pato surfeando:

La realización del pato depende del volumen de la tabla. Si la tabla es muy grande y tiene mucho volumen será más complicado hundirla y, por tanto, superar la ola por debajo.

Con tablas de surf cortas, es decir, de poco volumen es más sencillo realizar la maniobra.

Por lo tanto, elegir una tabla de surf u otra dependiendo del tipo de olas que hay debe ser tenido en cuenta.

La técnica puede ser practicada en el mar sin olas, en piscina e incluso en tierra.

Es recomendable, por lo tanto, realizarla previamente a una sesión de surf.

Cuando remamos hacia la ola, la distancia para parar de frenar debe ser en torno a los 2 metros.

Si continuamos remando, no nos dará tiempo a realizar el movimiento.

Si paramos antes, la ola nos alcanzará a escasa velocidad.

La entrada a la ola debe tener un ángulo aproximado de 45º.

Si es muy horizontal, la fuerza de la ola nos empujará, revolcándonos y haciéndonos girar.

Si es demasiado vertical, nos hundiremos, costándonos el doble realizar la salida de la ola.

Además, en algunos casos la cola de la tabla se quedará por encima de la superficie del mar, siendo golpeada por la ola.

El tiempo de permanencia bajo la ola debe ser ajustado al paso de la misma.

Si estamos demasiado poco tiempo, saldremos en el mismo final de la ola.

En cambio, si estamos demasiado, podremos encontrarnos la siguiente ola de la serie demasiado cerca, sobre todo en caso de poco periodo.

Por lo tanto, es recomendable abrir los ojos para saber cuándo salir.

Cuando ya se tiene la tabla estable y las turbulencias han seguido su camino, el proceso continúa aplicando presión en la cola de la misma, con el pie o la rodilla y se posiciona la tabla con dirección ascendente, evitando las fuerzas de dirección opuesta que puede llevar la ola.

Estarás de nuevo en La superficie, llegando además con velocidad, favorecida por la flotabilidad que da la tabla de surf, el traje especial utilizado y las turbulencias en forma de círculo que fomenta la ola cuando te pasa por encima.

Este punto marca el inicio del proceso nuevamente.

Todo esto quedaría resumido en los siguientes pasos:

-      Antes de que llegue la ola, rema con fuerza, el timing es importante. Con esa inercia comienza el pato, pero no muy pronto ni muy tarde, sino justo cuando la espuma está delante de ti y antes de que te impacte. Práctica, también aquí, es clave.

-      Agarra los cantos a la altura de los hombros con equilibrio y a la misma altura.

-      Empuja la punta hacia abajo y adelante, como si buscases clavarla en el fondo.

-      Con un pie empuja el tail de la tabla hacia abajo y con el otro mantén el equilibrio bajo la espuma de la ola.

-      Cuando notes que la ola está pasando sobre ti, puedes sostener esa posición sumergida con la rodilla y darle el último empujón a la cola para que la punta apunte hacia arriba y te ayude a salir del agua.

Los probables fallos son:

Salir muy pronto a la superficie, cuando no han terminado las turbulencias; es recomendable abrir los ojos para estar atento a esta incidencia y no exponerse innecesariamente, esperando que pasen para salir cómodamente.

RECOMENDACIONES PARA REALIZAR EL PATO

Para lograr óptimos resultados en la realización del Pato, te dejaremos algunas sugerencias o recomendaciones adicionales.

Lo primero es visualizar correctamente el movimiento que debes ejecutar; es importante leer varias veces los pasos para realizar la técnica, así te familiarizas con ella antes de ponerla en práctica.

Puedes imaginar los movimientos a realizar.

Puedes practicar la fase dos o entrada, fuera del agua, en la arena de la playa; así podrás corregir errores y hacerla correctamente.

Una buena opción es realizar series de nado en una piscina y  tocar fondo varias veces. 

Otro ejercicio o práctica recomendada es picar olas desde la orilla, sin utilizar la tabla, en una práctica similar a la que hacen los salvavidas o socorristas; de esta manera puedes conocer y establecer los tiempos de entrada y salida.

Empleando una tabla pequeña o un bodyboard, puedes intentar la práctica del Pato en una piscina o en alguna área del mar sin oleaje, aunque no contarás con la succión que da la espuma cuando te encuentras en el agua con oleaje.

La paciencia es clave para la obtención de los resultados deseados al practicar la Cuchara, Pato o Duck Dive; también es importante practicar la técnica varias veces para ir corrigiendo fallas hasta lograr la optimización y excelentes resultados.